mayo 03, 2009

ASESORES DEL APARATO PÚBLICO.

El ambiente político nacional ha estado bastante fome ultimamente, pero en el medio electrónico La Segunda, aparece una información que considero importante, y es la que dice relación con las remuneraciones que reciben los llamados "asesores del aparato público", gracias a la información que ahora se puede obtener por la reciente puesta en prática de la "LEY DE TRANSPARENCIA" La información señala que aparte de ser una gran cantidad, según la información del diario, los montos de esas remuneraciones son bastante elevados, tomando en cuenta el nivel de educación que éstos asesores muestran, y que es solo de 4to de enseñanza media. Fuera de estos trabajadores en nuestro país, con ese nivel educacional, nadie recibe una remuneración de ese monto, incluso son miles los que teniendo un título universitario ganan solo la mitad. Como puede ser esto...? bueno en el mundo de la política y la administración pública solo se puede dar esta situación, ya que en el sector privado esto es impensable, salvo que seas pariente del dueño de la empresa, porque en los nieveles altos del mundo privado también se ven estas incongruencias. Además no debemos olvidar que estamos en "pitutolandia", porque en nuestro país existe una verdadera cultura de la falta de rigurosidad en muchos ámbitos, entre los que se destaca el de los trabajos, que en una gran cantidad están ocupados por personas no idoneas, por decirlo de una manera suave, ya que en muchos casos se trata francamente de analfabetos funcionales, cuya única gracia es tener un pariente influyente.
"Para la gerenta gerenal de la empresa de headhunter SoutQuest, Paulina Caroca, "las empresas no buscan «egresados de», sino que titulados".-¿Te explicas un egresado en derecho que gane $3 millones?-No he visto casos así en la empresa privada, no me imagino... ¡salvo que sea pariente del dueño! Sobre todo en profesiones donde hay trámites que sólo puede realizar un titulado."
Desde todo punto de vista, aplicando un mínimo de racionalidad, esto es muy negativo, tanto para la marcha del país como para quienes se esfuerzan en estudiar y sacar su título en la educación superior, y que por no tener un buen contacto deben aceptar un trabajo para el cual están sobrecalificados. Estamos en la era de la información y el conocimiento, una verdadera revolución a nivel global, y esta realidad nuestra va en sentido contrario a lo que debería ser, osea que los más efecientes ocupen los puestos adecuados. Como país subdesarrollado seguiremos perdiendo terreno con respecto a los desarrollados, en esta actual sociedad del conocimiento.

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